por samario el Mar Nov 16, 2004 11:21 pm
pero no todos los imperios son eternos, y menos uno establecido por un clan desconido que se hacia llamar pol.
No transcurrio mucho tiempo cuando un sacerdote, fiel sirviente de los pol, llegó ante el emperador para declarle un augurio, la desgracia que nadie podría imaginar, algo jamas visto antes, nadie lo podía creer, era imposible que algo asi sucediera, pero sucedio...
Todos los miembros del clan pol, sus descientes, sus hijos, los hijos de sus hijos, los hijos de los hijos de los hijos, y cada pariente hombre fueron obligados a ...